lunes, 28 de diciembre de 2015

El año del CAMBIO 2016 pos Carlota Salazar

La política y su tiempo
El año del CAMBIO 2016
   En las elecciones del 6D la sociedad venezolana demostró que sabe lo que quiere y cómo lo quiere. Ya esa minoría de edad a la que se refería Kant, no existe, nosotros adquirimos nuestra mayoría de edad, para decidir sobre nuestro destino y asumir el reto de participar en colectivo, para el logro de objetivos comunes. La sociedad venezolana exigió un “cambio”, que comienza el 5 de Enero del 2016, con la instalación de una nueva mayoría parlamentaria en la Asamblea Nacional, la cual demás de restablecer el equilibrio entre los poderes públicos, ejercer el control del gasto, de las empresas del Estado, en especial PDVSA, que ha pasado a ser la financista electoral del gobierno, fuente de corrupción, abrir los espacios a la sociedad organizada, para que se exprese válidamente.
Digo esto último porque el “cambio” más importante que debe comenzar a gestarse en el país está en nosotros, en el seno de la sociedad venezolana, donde está nuestro sentir, añoranzas y sueños, por un mejor país en paz y en democracia. En ese sentido lograr una verdadera y sincera democracia participativa, protagónica, descentralizada y plural.
 Este nuevo Poder Público debe reglamentar la utilización de las herramientas de la participación ciudadana: asambleas ciudadanas y cabildos abiertos, para que sus decisiones sean verdaderamente vinculantes, consultas legislativas y populares, propuestas legislativas, convenios de cogestión y autogestión, a través de una ley, que tiene su primera aprobación, la Ley de Participación Ciudadana.    
Cobra  importancia el fortalecimiento de los consejos comunales, de las asociaciones de vecinos, de defensores de los consumidores, de los usuarios, de los colectivos minoritarios, empresas de propiedad social, establecer mecanismos de consulta permanente con la sociedad; organizaciones de base que le den forma a los diferentes sectores, profundizar institucionalmente la democracia participativa.
La “política”, que hasta ahora, ha estado gravitando en los cogollos de los partidos políticos y en los grupos de opinión. La “política” debe impregnar a la sociedad, para la toma de decisiones que redunde en calidad de vida. Con ello, lo más importante un  modelaje político desde la honestidad y el compromiso social, en el cual se fomenten redes sociales que conformen cohesión social, que permita construir una ciudadanía libre, que deje atrás el control de los partidos políticos.
Estos días de navidad y del advenimiento de un nuevo año, nos debe llamar a la reflexión y a la renovación de propósitos, de proyectos individuales y colectivos. Mi reflexión gira en tono a la necesidad de una sociedad más humanista, colectivista y solidaria ¿y la tuya?
Carlota Salazar Calderón

@carlotasalazar

6D-1998 y 6D-2015: mismo día, misma urgencia de cambio

Por Luis Manuel Aguana

 “… La Constituyente, la línea Constituyente, es la línea macro política, tiene como objetivo exclusivamente transformar el modelo político que es la raíz o una de las raíces del problema. La podredumbre del sistema político venezolano. Yo no creo que haya un solo venezolano que pueda hoy defender este sistema político, a menos que esté interesado en que continúe. Pero los venezolanos honestos, analíticos, observadores tenemos que concluir que hoy tenemos un sistema político que está podrido, esa es una de las razones morales y políticas del drama venezolano…”. Esto no lo dijo alguno de los que proponen ahora la solución constituyente; o este escribidor que los ha estado importunando machaconamente desde hace un buen tiempo, tratando de explicar el para qué queremos una Constituyente. Son palabras de Hugo Chávez Frías en el Programa Primer Plano en su primera entrevista de calibre, el 18 de Octubre de 1998, antes de ser electo Presidente de la República con las reglas de la democracia (ver Hugo Chávez Frías | 1998/10/18 | Marcel Granier, min 45:00, https://youtu.be/U8uxmOEwZcw).

¿Y porque he desempolvado ese video? Porque Chávez utilizó el mismo argumento que estamos usando nosotros pero aplicado a un sistema que todavía podía ser corregido, si los que gobernaban en ese entonces hubieran escuchado las alarmas de cambio que la población había disparado y que se hizo evidente con la elección  de un golpista, paradójicamente el 6D-1998, mismo día en el que los venezolanos manifestaron el mismo deseo de cambio como conmemorando ese día el 6D-2015. Mismo día, mismo deseo de cambio urgente.

Chávez aprovechó el grito de cambio que hacía la sociedad y se montó sobre ese deseo manifiesto que ya era indetenible. Sabía que la convocatoria a un proceso constituyente renovaría de una manera profunda el sistema, pero lo haría con sus reglas. Y lo pudo haber hecho para bien pero, como supimos amargamente después, traía escondido en su morral un sistema fracasado e importado que no se ha podido instaurar todavía porque no se corresponde con las raíces democráticas del pueblo venezolano. Y por ser un sistema fracasado en el mundo, los problemas que intentó corregir se profundizaron a tal extremo que ya estamos al borde de la hambruna.

Pero eso no quiere decir que el planteamiento de cambio en 1998 no fuera válido. Todo lo contrario, no solo es más válido en estos momentos, sino también urgente, pero con un ingrediente que  no hubo en aquel entonces: todo lo que se hizo desde ese momento hasta ahora para atornillar en el poder a una dictadura, debe desactivarse como se hace con una bomba a punto de estallar; lo que hace que el proceso sea más delicado y que requiera de una ingeniería política de altísima precisión.

Es como si quien accedió al poder en 1998 con la excusa de salvar a Juan Bimba de morirse de hambre, no solo le robo los reales de su comida sino que le puso un chaleco-bomba para matarlo más rápido. Menudo problema...

Pero además de ese, hay otro ingrediente adicional que funciona como una correa extra que le amarra a Juan Bimba el chaleco al cuerpo: que quienes fueron desplazados por el planteamiento de cambio de Chávez de 1998- aquel sistema político podrido que refería-, al comenzar a verse arruinados el 6D-2015 los planes de continuidad del régimen por el fracaso del sistema que se quiso imponer, se plantean ahora  un regreso triunfal como si en ese entonces y ahora, 17 años después, aquí no hubiera pasado nada.

Tal vez eso sería posible si todos nos hubiéramos muerto en estos 17 años de oprobio, o no recordáramos por viejos el porqué nos hallamos aquí, o peor aún, supone que quienes desean ese regreso triunfal nos crean un atajo de idiotas. El pueblo tiene pegada al cuerpo la bomba pero también la correa que la sujeta. La primera no sale sin la segunda…

Debemos desactivar la bomba pero las correas siguen todavía bien amarradas al cuerpo del pueblo porque en todos estos años ahora existe un grueso importante del electorado sobre el que ahora descansan también esas aspiraciones de “regresar”: la gente joven, que solo eran unos niños en 1998, que no podrían recordar el porqué llegamos a Chávez y sus promesas. Y no se preguntan quienes eran de verdad -y todavía son- esos personajes que tampoco querían un cambio político el 6D-1998 y que se disfrazan ahora en la aspiración de un nuevo cambio expresado el 6D-2015.

A esa juventud en especial le recomendamos ver el video arriba reseñado, y son a los que debemos explicarles que el CAMBIO no es solamente salir del castro-chavismo-madurismo y sus herederos, sino del sistema que lo originó, que requiere de una reingeniería total del sistema político venezolano, que pueda preservar las aspiraciones de quienes legítimamente creyeron en el cambio de 1998 y de quienes impulsamos un cambio mucho más profundo del sistema político, económico y social de Venezuela plasmado en las páginas del Proyecto País Venezuela Reconciliada Vía Constituyente (http://proyectopaisviaconstituyente.blogspot.com/).

Ustedes dirán que este hueso que no suelto de la conducta de la vieja política venezolana es una fijación obsesivo-compulsiva como ya han señalado por escrito mis estimados amigos. Tal vez eso sea posible pero al ver el comportamiento de los viejos y los nuevos partidos ante el fenómeno político del 6D-2015, pensando que de verdad ganaron esa elección, -como lo pensó Chávez en 1998- y no como la manifestación de un profundo deseo de cambio estructural de lo que pasa en el país, no me queda otra cosa que concluir  que todavía no interpretan lo que dijo el pueblo venezolano ese día como tampoco no interpretaron -ni aprendieron nada- lo que el pueblo sentenció en 6D-1998 cuando le entregó el país a Chávez. Y eso tiene consecuencias, como las tuvo el país a partir de 1998.

La gravedad de toda esta situación es tan compleja que requiere de un recomenzar con los que vieron la película completa, con los que llegaron a mitad de la función y con los que ni siquiera vieron el comienzo, y que no pueden ser con los mismos que crearon el problema y le pusieron el chaleco-bomba a Juan Bimba, ni tampoco con los que se lo amarraron al cuerpo. Solo así podremos parir un país nuevo reconciliado en paz y democracia. Y eso mis queridos amigos, es una Constituyente...

Caracas, 28 de Diciembre de 2015

Twitter:@laguana

martes, 22 de diciembre de 2015

Plebiscito 6-D y Reconciliacion nacional por Orlando Ramírez

                                                            

                            Plebiscito 6-D y Reconciliacion nacional 
                                        por Orlando Ramírez (*)

El 6D la Sociedad Civil, expresó su voluntad para restituir la democracia. El pueblo conscientemente se manifestó, votó, categóricamente y dictó una lección contundente de lo que quiere: Un Sistema Democrático en vez del Modelo Neo Comunista, pregonado a todo pulmón por los gobernantes, como Socialismo del siglo XXI.  

El Soberano, que está por encima de los Poderes Públicos plebiscitariamente («Apoyo masivo de un pueblo a una determinada causa»)   le infringía una derrota  al gobierno después de 17 años  de estar  ufanándose que eran invencibles, acompañado de expresiones: «No volverán los apátridas» «correrá sangre en las calles» y muchas amenazas más, nada edificantes, por ser mensajes oficiales de contenido segregacionistas,  excluyentes, violentos y ofensivos. Estos han sido la peor pesadilla, en la historia de Venezuela, con  la diáspora de miles de jóvenes, capital humano, de alta formación que, ahora,  han pasado a  convertirse  en tristes  parias refugiados, en otros países.  También se  cuentan en miles las empresas cerradas, o expropiadas, otras tomaron sus propiedades y se fueron. 

En lo que se refiere a la producción del campo, podemos recordar  lo que pasó con la empresa  Agro Isleña, que la convirtieron  en Agro Patria, cuyas políticas han quebrantado  la producción nacional  de artículos de primera necesidad.  Entonces, no ha sido, «la guerra económica» como los gobernantes han querido hacer ver, la verdadera causa de la derrota ha sido  las nefastas erradas decisiones del gobierno. Otros ejemplos, vividos por muchos venezolanos son  las  compras de cemento o cabillas para construir viviendas o la de hacer algunas reparaciones menores de sus casas,  resultándoles  imposible obtener estos u otros productos de primera necesidad; aún por muchos esfuerzos que se hagan. Todo resulta en vano.  El propietario de estos importantes bienes, es el gobierno nacional, que los expropió.  Arrebatando  ésta  actividad a la empresa privada, que lo hacía con eficiencia y a precios relativamente bajos.

La victoria contundente, así, tuvo un carácter plebiscitario y, también, reconciliador por sus resultados  para rehacer una Asamblea Legislativa nueva, un auténtico Parlamento de carácter plural y democrático. El triunfo de la Oposición, representada por la MUD, alcanzó 112 Diputados contra 55 del régimen.  Ciertamente, en otras oportunidades el gobierno  ha obtenido triunfos pero la mayoría de ellos de dudosa reputación y convicción, por razones suficientemente  válidas: No existen división de poderes, estos están conculcados   y sometidos al dictamen  del  Poder  Ejecutivo. Y como si fuera poco, algunos de  los éxitos alcanzados por la  oposición, los han sometido a vejaciones, voy a citar solo los casos de: Antonio Ledezma, Alcalde Metropolitano, le quitaron la mayor parte de sus atribuciones, le disminuyeron sus presupuestos, otro ha sido el caso de Daniel Ceballos, el Alcalde de la ciudad de San Cristóbal, ambos destituidos y encarcelados, sin Derecho a la Defensa. A los gobernadores de la oposición siempre les han nombrado en forma inconstitucional a gobernadores paralelos, recibiendo  presupuestos ilegales y todo el consecuente apoyo gubernamental. Ahora, han nombrado en forma  ilegal un Parlamento Comunal, para hacerle sombra a la nueva AN.   

Otros de los desafueros han sido el desconocimiento de la legalidad de varios diputados legítimos, como los emblemáticos casos de María Corina Machado, de Richard Mardo, de Maracay, diputados de las elecciones parlamentarias del año 2010, que ganaron democráticamente con la consigna: «Es tiempo de cambiar» Los resultados del 6-D, definitivamente, tienen la lectura  de  Reconciliación, pues,  para  los diputados electos de oposición, fue una de sus principales consignas;   y el pueblo las acogió.  La unión entre los venezolanos, es necesaria e impostergable, incluyendo a los militares institucionalistas y respetuosos de su propia ordenación. Unidos seremos invencibles. 

El MID, desde sus trincheras de lucha, con su Proyecto País, Venezuela Reconciliada… Vía Constituyente lo promueve y propone como la solución a la crítica situación política y económica. El próximo año es crucial y la lucha es indeclinable. Deseamos, y auguramos un  año 2016, una clara esperanza de bienestar.  El único  ganador del 6-D, es Venezuela y Venezuela somos todos.     

(*) Profesor Titular UNET. Egresado del Iaeden.  forlandormontoya@hotmail.com

sábado, 19 de diciembre de 2015

Ciudadanos, exijamos un nuevo pacto social Por Luis “Balo” Farias


Ciudadanos, exijamos un nuevo pacto social
Por Luis “Balo” Farias

Los objetivos que perseguimos impulsando la lectura del libro, Crisis venezolana, causas y soluciones estructurales* es orientar mayormente a los jóvenes de este país, en conocer lo que es desde nuestra óptica, y basados en la experiencia histórica, las causas que la originan, y que este aporte, nos permita buscar los mecanismos constitucionales, para salir airosos de esta interminable pesadilla, que se puede poner peor de lo que esta, hasta ahora.

Y es que es apretado, en un país tan polarizado, dar a conocer a ciencia cierta ¿qué es exactamente, lo que nos trajo a esta dramática situación?; tenemos a la sazón, que recordar circunstancias, que se mimetizaron con el pasar del tiempo, ejemplo aquel 18 de febrero de 1983 (viernes negro), cuando nuestra fuerte moneda  sufrió su primera gran devaluación y comenzó su rodada cuesta abajo, que hoy día continua, o el caracazo, el 27 y 28 de febrero de 1989, que fue la manifestación de ira explicita de los pobres de Venezuela, que sentían que la riqueza petrolera no les estaba llegando, o el juicio el 21 de mayo de 1992  y posterior presidio del presidente Pérez II, cuando hasta su partido le dio la espalda, y con ello se selló, la  debacle  electoral de  los partidos tradicionales en 1998,  fecha de la quiebra política de la IV república y también la debacle del modelo del “GOBIERNO DEL CENTRALISMO EN VENEZUELA, (EFC, Estado Federal de poder Centralizado)”

Hasta acá, si prestamos atención a las fechas, febrero del 1992, NO EXISTIA CHAVEZ, en la mente y vida de los venezolanos, pero entre revueltas, asonadas, corrupción, hambre y miseria, en un país tan rico, el difícil segundo gobierno del presidente Caldera II, cerró el año 1998, con 5.000 homicidios. Era una aberración lo que estaba sucediendo en Venezuela: devaluación, homicidios, corrupción, inseguridad, miseria y mala calidad de vida. Dentro de este contexto, los venezolanos, anhelábamos un líder, que resolviera esta dramática situación, de país en franca disminución en la calidad de vida.



Aspirábamos un líder inteligente, capaz, con visión de estadista, que lograra diagnosticar cual era la causa de la crisis venezolana y nos diera la solución que nos permitiera, retomar nuestras vidas en un país más incluyente, más justo, más solidario, mas humanista, y no era difícil de añorarlo y soñarlo, porque veníamos recientemente de recibir inmigrantes de otras partes del mundo, que con el boom petrolero vinieron a este país a traernos cultura, manufactura especializada en la producción de los bienes y servicios que la renta petrolera abundante, nos estaba dando a conocer, o a través de las importaciones que desde los centros del poder se autorizaban en Venezuela.

Y apareció un hombre, como le gustaba a los venezolanos, inteligente, visionario, simpático, arrecho, cantante, jodedor, carismático, vengativo de los pobres, mujeriego y MILITAR. Ave María purísima, los milagros existen, nos envió un caudillo, y entrando el siglo XXI, ¿Qué más pedir?, pensó más de uno.

Peroooo… (Todo tiene un pero) no era lo que los venezolanos creían, o estaban buscando, tenía algunas de esas cualidades, era: simpático, cantante, jodedor, carismático, se vendía como vengativo de los pobres, mujeriego y MILITAR, pero adolecía, de algo importante, la inteligencia y la visión; No entrare en el detalle del gran fracaso de su obra política, porque administrando 1 BILLON DE $, los resultados 15 años después están a la vista.




Hoy día, en un país que sigue siendo aun inmensamente rico, el difícil gobierno actual, está cerrando el año, con mas devaluación, corrupción, inseguridad, miseria, mala calidad de vida, revueltas, escasez, acusaciones de familiares y personeros, en casos de narcotráfico internacional y cerrando con broche de oro más o menos 25.000 homicidios (20.000 más que el último gobierno de la IV república-Caldera II).

Como vemos, tenemos ahora, potenciadas, las causas que llevaron a los actuales gobernantes al poder, y son las mismas causas que dieron origen al descontento que los llevo allí, y acá viene entonces la pregunta de las mil lochas: ¿De quién es la culpa, del mono o del que le dio la hojilla? de quien es la culpa que nos siga pasando, lo que nos está pasando ¿De ellos? ¿O de nosotros, que les damos el poder?

Les hemos dado a TODOS los líderes, un cheque en blanco, sin saber que van a hacer con nuestras vidas, con nuestro país, con nuestro futuro y el de nuestros hijos; desde el viernes negro, han transcurrido 33 años, cambiando de presidente y de gobierno, veamos CAP II (1989), OCTAVIO LEPAGE (1993), RAMON J VELAZQUEZ, (1993), CALDERA II (1993), CHAVEZ (1999), MADURO (2013) y les pregunto. ¿Qué ha cambiado en nuestra sociedad? ¿Hemos visto algún adelanto? ¿A qué se debe que estemos estancados? ¿Está usted seguro del rumbo que le quieren dar a nuestro país? ¿Es el cambio de presidente o de gobierno la solución? ¿O hay algo que no hemos visto, o que no nos han dicho, y que sería la verdadera solución a este conflicto?


                                             La descentralizacion

La IV República, aunque tarde, entendió (1989), que debería dar inicio a la descentralización política y  administrativa, y lo hizo con la Elección de Gobernadores y Alcaldes, y la ley de Transferencia de Competencias a los 23 estados y Municipios, (aunque los ha tratado de tener “amarrados” a través de los recursos o situados, manipulados aun a nivel central).

Este inicio de la descentralización política y administrativa, fue la respuesta parcial tímida y mediatizada del poder central, frente a la muerte técnica del centralismo del poder del Estado en Venezuela. Y a pesar de fallas permitió la aparición de liderazgos regionales de la provincia, que han constituido, el principal bastión de defensa de la democracia.

En otras partes del mundo y en otras épocas de la historia de la humanidad, ya pasaron por esta devastación que acá, está en pleno desarrollo y si queremos ser serios ante el país, tenemos que sentarnos y poner a “trabajar” la cabeza, a repensar, a rediseñar el país que tenemos, tomando en cuenta las experiencias históricas que están allí señalándonos el camino real de lo que tenemos que hacer.



Nos llega el 2016, y se cierne la amenaza de que, este “pleito innecesario” continuara, a costa de la incomodidad, la quiebra, y la insatisfacción de las bases populares de ambos bandos y por ende, en contra de la voluntad mayoritaria del pueblo venezolano que ya se expresó de manera contundente.

La pregunta de todos es: ¿Qué hacer ante este panorama?
La respuesta debería ser: Los ciudadanos de este país tenemos que exigirnos, un nuevo pacto social, incluyente y primermundista.

La rebelión de las regiones, es el llamado al despertar del país productivo, que NO está en Caracas, pero SI está, en todas las provincias de Venezuela,
esperando el llamado a suscribir un Nuevo Pacto, para sustituir el Centralismo presidencial, por un Estado Federal Descentralizado parlamentario y primermundista.

Esto, (que fue lo que comenzó de una manera tímida, y no culmino la IV república a través de la Comisión para la reforma del estado, COPRE, en los años 80 y lo que nunca hizo Chávez), es lo que podría redimir dos siglos de centralismo empobrecedor, para hacer realidad un país con alta calidad de vida, como cualquier país de los punteros del I Mundo: Noruega, Suecia, Holanda, Dinamarca, Canadá, Finlandia, Suiza, asumir al fin en Venezuela, una federación de 23 estados y 1136 municipios, o los necesarios, totalmente autónomos en lo político, económico, fiscal, educativo, salud, asistencial, vial, en la libre circulación de las monedas internacionales, en la responsabilidad y solidaridad empresarial, el libre mercado, la democracia parlamentaria, con división e independencia de poderes; sin pobreza; sin ninguna de las aberraciones del III Mundo.

Exigir este nuevo pacto implica, seguir promoviendo, un gran debate nacional que ponga de resalto con meridiana claridad las causas de la crisis venezolana y las devastaciones a la vista, que la misma ha originado, y que esta discusión desemboque, en la convocatoria de una Gran Asamblea Nacional Constituyente, pero con un objetivo definido, para cambiar el centralismo por la descentralización del poder.
Así como los constituyentitas y repúblicos de 1811, 1864 y de 1946, 1961, en tiempos y momentos trascendentales en la vida del país, lograron diseñar  textos constitucionales que en su momento fueron novísimos y pudimos rebasar situaciones que parecían imposible de lograr, elaborando constituciones que en sus distintas épocas fueron capaces de reencauzar la vida nacional hacia caminos de mayor prosperidad y paz nacional, nuestra responsabilidad, hoy, es de proporciones históricas en esta época aciaga que vive la república, pues  tenemos la enorme responsabilidad de buscar también, las vías y causes para retomar, el camino hacia una Venezuela más humanista, más civilista, más prospera,  reconciliada, democrática,  moderna  y primermundista.
Este Proyecto País Venezuela Reconciliada** que proponemos, debería desencadenar, una indetenible, masiva, electoral, pacífica y constitucional  “Rebelión en las Regiones” desde las bases mimas de la sociedad, a través de la convocatoria al poder originario (A través de los art. CRBV 347, 348, 349)
La profundización integral de la descentralización política y administrativa puede llevar a la democracia Venezolana a su estadio superior de desarrollo social y es lo que deseamos los venezolanos por eso entre TODOS, tenemos que salvar a Venezuela.


                                                                                                            Link de los libros:   

                                               *     drive.google.com/file/d/0B6yI0g … …


Proyecto País

Venezuela Reconciliada

Humberto Acosta R. *


“..No es la hora de las recriminaciones…Todo se puede lograr si hay voluntad   política, sin que a muchos  se les suban los humos…”
Víctor Julio Cárdenas Neira, 13D2015

Como  lo expresa, el Dr. Víctor Julio Cárdenas, dejemos las recriminaciones, discriminaciones y exclusiones (salvo la de  los delincuentes e irresponsables). Sumemos e integremos. La oportunidad es para la reconciliación con sana justicia e inteligencia racional, de la sociedad venezolana para avanzar, obtener y sostener la Venezuela Reconciliada. Lo esencial, en tal vía, es asumir la actitud de diálogo para consensuar y acordar objetivos comunes trascendentales, incorporados en un Proyecto País y con un Pacto Social-Político, que  permita la unidad e integración de los factores democráticos, políticos, sociales y productivos, en función de aportar soluciones a los enormes problemas, que  hoy padece la República.

El pueblo venezolano votó, plebiscitariamente, por el cambio del  régimen militarizado que durante 17 años ha sometido a la ciudadanía a una situación de crisis, caos, inseguridad e indignidad, no obstante, la disponibilidad de una enorme renta petrolera, del poder absoluto y el Estado de Excepción que han decretado e instrumentalizado. Esta situación, determino categóricamente que los electores, con su voto y la convicción democrática, sin miedo, dijeran NO al régimen, demostrado que un  pueblo decidido, consciente y movilizado activa su Fuerza imposible de vencer.

Los ciudadanos venezolanos, incluyendo los sectores más humildes y trabajadores de la base Chavista, se unieron rompiendo la polarización y las trampas habitualmente montadas. El pueblo  al buscar  soluciones efectivas, obligó al cambio, dentro del sistema democrático, en paz y con la Constitución.


Este es el mensaje principal de los resultados electorales del 6D: cambio y soluciones. Por consiguiente, tanto los partidos de la oposición, como del gobierno y las FAN necesitan, ahora más que nunca, entender e interpretar esta Fuerza Popular manifestada el 6D, que votó mayoritariamente por la Unidad Democrática, por la tarjeta única de la MUD, sin distingos de partidos políticos ni dirigentes nacionales o regionales

El voto y la voluntad del soberano privilegiaron la unidad y activó, autónomamente, la Fuerza Popular que hoy se manifiesta con 112 diputados y la Sociedad Civil empoderada. Fuerza sostenida con la  convicción democrática del pueblo que plebiscitariamente rechazó al régimen y deposito en la MUD su confianza y capital social para, entre todos, encontrar soluciones a los problemas de la República, los de los ciudadanos y los de sus correspondientes familias, comunidades e instituciones.

Tal Fuerza Popular, soberana y democrática, le corresponde asumir, ahora, en forma más organizada y con clara visión de futuro, la función de iniciar, promover, catalizar, vigilar y controlar las  acciones que, tanto los sectores democráticos, como las fuerzas del régimen y las Fuerzas Armadas Nacionales van a realizar en esta etapa crucial que vive el país, en un juego democrático, riesgoso, que apenas comenzará el próximo 5 de enero de 2016, con la designación de la nueva directiva de la Asamblea Nacional y el desplazamiento del inefable Presidente actual...

La Fuerza Popular, movilizada así, enfrentó y  derrotó  electoralmente a la Fuerza Gubernamental, con todo su `poder y sus permanentes maniobras, en su afán continuista ilimitado. Ello significa que la Sociedad Civil, su liderazgo concentrado en las Instituciones y en  las organizaciones civiles no gubernamentales, más los partidos políticos democráticos integrados o no  en la MUD, deben perfeccionar la UNIDAD y llegar hasta la INTEGRACIÒN (coordinación y sinergia para la Gobernanza necesaria) a través de los referidos objetivos comunes  que garantice continuar en la vía democrática e institucional para obtener la Gobernabilidad y el desarrollo que tanto reclama y mereceVenezuela.

El referido Pacto Social-Político y el nuevo Proyecto País para constituir y re-construir República, en consenso y en democracia. Son instrumentos, de arte y ciencia política, de teoría y praxis, para la reconciliación e integración, recurriendo a la conciencia y  responsansabilidad de los ciudadanos, utilizando los recursos que mayormente  dispone la sociedad civil: Fuerza Popular, capital social/humano y FE en el  cambio definitivo.

Roguemos a Dios, porque el próximo año sea de bienestar colectivo y en las navidades presentes reine la paz democrática.

*Ex. Rector UNET.

viernes, 18 de diciembre de 2015

Proyecto País Venezuela Reconciliada...Vía Constituyente: ¿Una constituyente en 2016? ¿Para qué? Por Luis ...

Proyecto País Venezuela Reconciliada...Vía Constituyente: ¿Una constituyente en 2016? ¿Para qué? Por Luis ...: ¿Una constituyente en 2016? ¿Para qué? Por  Luis “Balo” Farias                     El teme vuelve nuevamente a la palestra pública,...

¿Una constituyente en 2016? ¿Para qué? Por Luis “Balo” Farias


¿Una constituyente en 2016? ¿Para qué?
Por  Luis “Balo” Farias

                    El teme vuelve nuevamente a la palestra pública, y la mayor parte de los venezolanos, (siguiendo al refrán popular de que al “picao e culebra, hasta lo bejucos lo asustan” ante tanta información y desinformación de opinadores, algunos muy ilustrados y otros no tanto), aun no terminamos de entender ¿para qué son las constituyentes?
                   Y el problema es fácil de entender, pero difícil de explicar, y lo digo porque además, siempre lo he escrito y explicado en las conferencias, charlas, o conversatorios que con frecuencia hacemos en los diferentes estados del país donde con cariño invitan a estos gochos. Por eso luego de la invitación, y entendida la explicación “se pegan” como abejas a la miel, a nuestro proyecto país Venezuela reconciliada
                    Me explico, una constituyente es para “transformar el estado, crear un nuevo ordenamiento jurídico y redactar una nueva constitución” y muchos de ustedes se preguntaran: pero si ya hemos tenido 25, ¿hasta cuándo vamos a estar haciendo constituciones? y la respuesta correcta es: hasta que la hagamos bien hecha.

Artículo 347 CRBV: “el pueblo de Venezuela es el depositario del poder constituyente originario. En ejercicio de dicho poder, puede convocar una asamblea nacional constituyente con el objeto de transformar el estado, crear un nuevo ordenamiento jurídico y redactar una nueva constitución.”

                    Pero ¿eso no fue lo que hizo Chávez en el 99? ¿En qué fallo, la última convocada por Chávez? Fallo en todo, 1ro) la convocatoria en sí misma, que fue un vil engaño a los venezolanos, 2do) y el objetivo final de transformar el estado por uno mejor que el que teníamos, (porque de no ser así, no tenía sentido el convocarla)
                     Punto 1ro): Una constituyente tiene que convocar a todos los habitantes del territorio (no solo a una parte) porque, lo que va a salir de allí es un pacto, con las normas que van a regir a esa población de habitantes y que todos se comprometan a cumplirlas.
                    Chávez en su 2da pregunta de esa convocatoria, utilizo un ardid engañoso, para con el 56% de apoyo popular, que tenía en ese momento, hacerse con el 96% de los Constituyentistas. Así lanzo su Decreto Número 3. (02/02/1999) con sus ya conocidas y tendenciosas preguntas de la convocatoria para ese entonces: recordémosla: ¿Autoriza usted al Presidente de la República para que mediante un Acto de Gobierno fije, oída la opinión de los sectores políticos, sociales y económicos, las bases del proceso comicial en el cual se elegirán los integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente?
          Esta pregunta anterior capciosa, tramposa, requiere atención detallada, veámosla de nuevo ¿Autoriza usted al Presidente de la República para que… fije… las bases del proceso comicial? Y así, la norma comicial, fijada unilateralmente por el régimen, sin respetar el necesario sentido democrático, estableció que: “Cada elector dispondrá de tantos votos como constituyentes a elegir”
       ¿Qué significo esto? Que por ejemplo, en Táchira elegíamos 4 diputados o sea teníamos derecho a 4 votos y al aplicar esta norma, pues el 56% de ellos voto 4 veces por los candidatos a diputados, lo que en la práctica hizo que se eligieran solo los candidatos de ellos, (4 a 0) o sea con el 56% se hicieron a la representatividad de todos los tachirenses (sin oposición)
     Fue el engaño preliminar, básico, utilizado para apropiarse, con el 56% de apoyo, de la mayoría total de la Asamblea Nacional Constituyente y hegemónicamente, imponer  su criterio y así manipulando el poder y la maquinaria electoral oficial, lograr el extraordinario “triunfo revolucionario” de 1999. De 131 Constituyentistas, 125 fueron del oficialismo. ¿Cómo explicar esta irregularidad? Como explicarnos nosotros y al mundo que una minoría relativamente mayoritaria,  representativa del 56% de los electores, impuso siempre sus criterios  de dominio total, sobre el resto de la población.
     No hubo consenso, base de todo proceso constituyente y por supuesto,  tampoco se discutió un proyecto de país incluyente, resultando una Venezuela que solo es Nación y Patria para los venezolanos, que el régimen califique de ”revolucionarios”.
      Así, la crisis política-social-económica-ética ha alcanzado tal nivel que Venezuela, terminando el año 2015, es un país dividido socialmente, con objetivos discriminatorios con los cuales no ha podido avanzar, con propuestas excluyentes ancladas en el pasado. Así hemos retrocedido en todos los espacios del sistema social venezolano.
                 Ósea, no fue un pacto de TODOS los habitantes de Venezuela, (nació coja de origen y de legitimidad) aun así es la que tenemos y asumimos respetarla.

               Punto 2do) Transformar el estado, significa… transformar el estado y el único estado que los venezolanos hemos tenido, en nuestros 200 años de vida republicana, es un estado presidencialista-centralista, que se llama, Estado federal (porque está dividido en instancias territoriales intermedias que son los estados, los municipios y las parroquias) de poder centralizado (porque todos los poderes, han estado siempre dependiendo, del poder central).

                     El  Estado Centralizado presidencialista procede directamente del Estado centralista colonial español cuya esencia se trasladó a todas las Constituciones del país, desde la de 1810 hasta la de 1999 inclusive, así en nuestro país ha causado la misma ineficiencia, corrupción y devastaciones que fueron causadas por los Presidentes imperiales también en las Repúblicas de Alemania, Italia y por el Emperador Hirohito de Japón.

                    Esta monstruosa concentración de poder, en nuestros gobernantes, y en otros, de otras partes del mundo, es lo que ha causado y potenciado el fracaso del modelo del EFCentralizado-presidencialista
                     Ese estado de poder centralizado, no lo cambio la constituyente del 99, todo lo contrario, se hizo una constitución, a la medida del jefe del estado y ese poder hegemónico absoluto es la causa estructural de nuestro fracaso como sociedad

                   Hugo Chávez, cometió un gran error: no identifico el origen estructural de la crisis venezolana, y esto lo llevo a  preservar y momificar, aún más el centralismo en la Constitución de 1999. Hizo un Estado todopoderoso personalizado en el como Presidente; con una nación absolutamente dependiente de las dádivas del Estado en materia alimentaria, financiera, educativa, investigativa y asistencial y no contento con ello, lo reafirmo aún más dándose más poder a través de leyes habilitantes.

No entendió Chávez, que el centralismo del poder, alrededor de la renta que producía el petróleo, materia prima muy importante de la producción, (pero no la única) pero que si no se industrializa, si no se explota, si no se trabaja, si no se ofrecen sus productos al mercado, si además, no se diversifica la economía con la gran cantidad de commodities que tiene Venezuela, si no se le permitía a las familias venezolanas de asumir el rol que Dios les dio de transformar en origen los productos naturales renovables y no renovables, para fomentar y generar Agricultura, Industrias, Comercio etc. DE NADA SIRVE
                       Los EFCentralizados no han sido instrumentos eficaces para superar la pobreza, la injusticia, ignorancia, exclusión social y devastación institucional acumuladas en ningún país del mundo, ni en ninguna época de la historia de la humanidad, de hecho, en este contexto, la aparición de Chávez fue consecuencia de esa misma crisis que sacudió la IV república, y al no saber identificar el origen de ella, vemos actualmente, como los resultados exhibidos de tal proyecto político y la forma arbitraria de hacer política, empeoraron aún más los problemas del país.
                    Esta monstruosa concentración de poder, en nuestros gobernantes, es lo que ha causado y potenciado el fracaso del Estado presidencialista- Centralizado.
Un problema estructural a resolver, que no tiene solución con el simple cambio de un gobierno por otro o de un Presidente por otro.
En conclusión: la próxima convocatoria a un nuevo pacto social, tiene que ser 1ro)  ética y plural, que convoque a TODOS LOS VENEZOLANOS y 2do) realmente para cambiar el modelo centralista heredado de la colonia, por uno descentralizado, moderno, democrático, parlamentario, y primer mundista.
                  ¿Lo asimilaremos y aprenderemos algún día?  en eso estamos.

                                               Luis “Balo” Farias